Al solicitar asilo, solicita al gobierno estadounidense protección para evitar que tenga que regresar a su país de origen. Si se le concede asilo, debe abstenerse de regresar. Sin embargo, después de obtener la ciudadanía estadounidense, si las circunstancias cambian y disminuyen su temor a regresar a su país, puede hacerlo. Consulte con un abogado de inmigración antes de salir del país si se le concede este tipo de protección.